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viernes, 7 de octubre de 2016

LA PAZ UNA UTOPÍA ANTIGUA: ENTREVISTA CON "LOS INDOMABLES"

Por YAS

Hola, tengo el agrado de reunirme con Alejandra Erazo, más conocida con su seudónimo de Velamar, líder de el colectivo literario "los indomables" para conversar acerca de Colombia y su sueño de Paz, también vía Chat tenemos contacto con Aleyda Escobar y Alejandro Hernández, juntos desarrollaremos el tema específico de la paz para crear en sentido literario una realidad.

- En primer lugar agradecerles su presencia y preguntar de inmediato ¿La paz se puede lograr?

Contesta Velamar: El concepto es muy amplio y en definitiva a quien le ha correspondido librar un conflicto sea como actor o como víctima lo entiende mejor. La paz es la reunión de una condiciones propicias para el ejercicio del albedrío.

Dice Alejandro: Bien o mal en un mundo como este el concepto de paz yace en la conciencia de cada quien y es desde su perspectiva como hace realidad esa paz.

- El conflicto en Colombia lleva más de cincuenta años, hay gente que ha muerto esperando el cese de la violencia, diversas corrientes políticas y civiles han intentado negociar la paz, y ahora cuando por fin se vislumbra el triunfo de un acuerdo llega la gente y reniega de tal acuerdo diciendo un "no" rotundo y calificando al gobierno de traicionar el deseo popular ¿Cómo traducir el deseo de un pueblo en lograr la paz con condiciones tan diversas?

Dice Aleyda: El inconveniente principal es lograr el consenso, Colombia es un país dado hacia lo conservador, las clases sociales se verifican claramente, y es por eso que el conflicto ha desbordado y ha sido inclemente, la violencia se ha ejercido tanto en los estrados judiciales como en las selvas. Hoy cada quien su interés con la paz y entonces cada quien tira para su lado.

Velamar comenta: Es muy bonito hablar de la Paz cuando se tienen los medios de producción, cuando se tiene asegurado un futuro. Pero la desigualdad sigue allí, unos viviendo al extremo de subsistir con la ganancia diaria, mientras otros viven en el derroche. Usted hable con los encargados del reciclaje de las basuras, la gente de la opulencia desecha las cosas porque si, y mientras la gente suspira deseando una moneda más.

- El gobierno y su política genera un efecto de polarización, la que en últimas va en contra de la democracia, el pueblo queda demostrado se resiste a involucrarse en lo que considera un caso perdido, y esta demostrado que a una gran mayoría no le va, ni le viene el destino de una nación, esto es como si la guerra y la paz fuesen escenario cada cual con su conveniencia ¿Se verifica un conflicto también psicológico? ¿Una especie de enfermedad genética incurable?

Dice Alejandro: Somos hijos de una violencia antigua, y el deseo de paz viene desde épocas atrás, hay quienes culpan a la propia colonización de los males de hoy. La paz viene siendo como tratar de atrapar con la mano el aire y en este ejercicio así, con el puño cerrado agredimos a los que decimos amar. Si hoy se habla de acoso laboral, de violencia intra familiar, de matoneo, dónde está la paz o bien en potestad de quién esta elegir o no la paz.

Velamar dice: El machismo y el feminismo, la controversia del género, el libre ejercicio de la sexualidad, son temas álgidos que nos convocan a la reflexión, pero la prelación la estamos otorgando a temas superficiales como la clase social, la distinción racial o la pertenencia a un partido político o en el peor de los casos a un equipo deportivo. Es de locos, yo digo.

- Se dieron unos acuerdos extensos y que por no decir la mayoría no leyó, y los que los leyeron no entendieron la mayor parte. Hay estadísticas que sitúan a los países de Latino América con los indices más bajos en cuanto a lectura. A nivel literario ¿cómo contribuir en el logro de un entendimiento común?

Aleyda dice: La ignorancia no debe ser tolerada, desde el hogar la formación debe ser integral, es claro que a los estamentos del gobierno les inquieta que la gente sea ilustrada, la corrupción se ampara en la mentira, en la manipulación y en la soberbia.

Velamar dice: El rumor es más veloz que la verdad, nuestra tarea es ser testigos y vociferar a la luz la verdad, enseñar a leer y a escribir, a interpretar, inculcar curiosidad, y por sobre todo dar pautas para que la gente aprenda a diferenciar y sean certeros con su elección.

- Es irónico como hoy con el auge de las redes sociales y los medios de comunicación masiva, la gente esta tan desinformada. Pero más preocupante el hecho de que la gente a pesar de contar con todo este cúmulo de elementos y facilidades se quede en silencio ¿Hay una resignación o es simple ejercicio del miedo?

Alejandro dice: Es incredulidad, inseguridad, nerviosismo, el vecino te puede desautorizar, el político con corbata y vestido te puede mandar a callar a ti que vienes vestido de víctima. Yo creo que le hacemos la venía al político siendo que él debería arrodillarse ante sus votantes.

Velamar dice: Hay mucho miedo por todas partes, y es sobre el qué dirán, sobre el qué pensarán. En medio de esto se toman las peores decisiones.

- Se cumplieron cuarenta años de la muerte de Gonzalo Arango, yo he leído frases respecto a la guerra y a la paz, en todas estas frases Gonzalo controvierte el hecho que la paz sea asunto común, y es claro que no se puede hacer una guerra sin la participación de dos o más personas o grupos ¿El problema entonces se puede decir que es el otro?

Aleyda dice: Hay gente que le quiere quitar la comida a otra gente, es el principio de la violencia. Pero la solución es de aceptación, de tolerancia de saber compartir, no tanto del otro como tal.

Alejandro opina: Yo no puedo exigir el otro piense y crea como yo, yo he vivido las circunstancias, he sido libre en mi forma de ser y pensar, el otro puede que sea más o menos respetuoso, puede tolerarme e incluso aguantar mi proceder, hay entre él y yo un lenguaje, la solución: hablar entonces.

Velamar habla: Yo respeto hasta donde mis conocimientos me digan es lo correcto, luego podría traducir que se ejerce violencia en mi contra, un hombre puede venir a mi con oscuras intenciones y yo soportarlo hasta cuando ya crea se trata de sobrepasar conmigo.

- Leyendo un poco sus publicaciones virtuales e incluso los libros de Alejandro, me topo con una perspectiva poco alentadora, puede que la paz se firme en diferentes escenario y hasta acuerdo, pero solo una paz es absoluta: la de la tumba, suena pesimista ¿Nuestros hijos van a librarse del conflicto o habrá que prepararlos para soportar esa carga que les heredaremos?

Alejandro dice: Nuestra literatura es apocalíptica la mayoría de veces, triste,melancólica, y nosotros somos alegres, positivos, logramos un equilibrio forjado en la adversidad, tampoco se la dejamos fácil a nuestros lectores, requerimos su análisis, su traducción, su opinión, queremos hacerlos pensar, y no solo para que se salven del Alzheimer, si no del deseo de caer en manos de la masa torpe y perjudicial.

Velamar opina: Hay que aprender de todo en un escenario  tan cambiante y disperso, puede que el amor sea una gran filosofía, pero yo digo a un niño no se puede darle una víbora de mascota y pretender que el día de mañana la ame y la defienda.

Aleyda dice: Dolorosa la herencia que les dejamos, y oscura la pretensión de dejarles cosa materiales para que además de pelearse por ellas tomen las decisiones incorrectas.

- El mundo puede acabar mañana, y hay una especie de resentimiento de egoísmo, de hipocresía, alguien jura amor eterno, alguien más solo aparece cuando necesita algo, y otro más miente con desprecio. La violencia es antigua, veterana y la paz quiere ser una novedad ¿Cómo explicar a las nuevas generaciones el peligro que corren si no eligen bien hoy?

Velamar dice: La educación debe ser incluyente, debe propender por el respeto así las diferencias sean extensas. La verdad no esta dicha y hay que seguir en su búsqueda, hay que reflexionar, meditar, e insistir en que ha y distintos caminos y una posibilidad futura: la tranquilidad.

Aleyda opina: Es cierto la tranquilidad del futuro se gana educando desde hoy.

Ha sido un gusto conversar estos temas con ustedes y desde ya me uno a su propósito literario, quiero causar inquietud, deseo perfilar nociones prácticas para que la gente tenga mejor y mayor visión de la realidad. Gracias y nos encontraremos en otra oportunidad.